Ar yu tokin tu mi?

-Oye, ¿me prestai typex?
La respuesta de vuelta empieza con cara de en qué idioma habla este otro
-¿Qué cosa?
-Typex... eso blanco, para borrar...
-Ahhhh, liquid. Toma

Liquid. Quién le dice Liquid al Typex, pensaba yo. Seguro mi compañera pensaba quién puede ser tan raro como para decirle Typex al Liquid. Ahí caché que las diferencias que iba a encontrar en Santiago recién llegando a la vida universitaria serían más que las evidentes (tamaño de la ciudad, cantidad de gente, ritmo de vida, etc). En realidad no eran diferencias tan grandes, pero me llamó la atención esa anécdota y me recordó un capítulo de Los Pitufos en que el pueblo se dividía en dos por un tema lingüístico. Después me di cuenta que el cartonero acá era tip top; que el jarro era la jarra; que la marraqueta era el pan francés y que el balón de gas era la bombona. Pero además aparecieron otras diferencias, que tienen que ver básicamente con la manera de ser de la gente.
Por ejemplo, en Talca -y en regiones en general- los acarreos son prácticas frecuentes. "Me vay a dejar a mi casa?" es una petición bastante común. A pocos se le ocurriría decir que no y menos aún decirle "Ya, pero págame la bencina". Qué es eso!? Quizás alguno se sentirá identificado, pero no lo tome a mal. Son sólo costumbres distintas supongo. Pero que a uno pueden chocarle un poco. Otro? Uno llega a un carrete con algo para tomar. Lo deja sobre la mesa. Al rato viene alguien y te dice: ¿Oye, me day un poco? Obvio! Si es para el carrete, no para tomármelo solo. Pero en stgo parece que se acostumbra eso. Que lo que uno lleve es para uno solamente. Cómo tan cagao? Pa eso mejor me quedo en la casa chupando solo una promo. Los carretes son para compartir. No se trata de regalar la wea, pero de ahí a andar vigilando mas o menos quién te saca... no será mucho?
Supongo que son sólo idiosincracias distintas y claramente esto no se puede aplicar a todos los santiaguinos ni a todos los talquinos. Pero llaman las atención estso detallitos...

SupersoniC!!

No cacho cómo empezar este post.
Todavía como que estoy un poco agitado.
Es que me sorprendieron, porque fue un espectáculo notable. De pelos!
Pueden decir lo que quieran de Oasis: que son arrogantes, que llevaban 3 discos guateando, que no le han ganado a nadie, que se parecen a los Beatles... Prfffffff.
Eso ayer se desplomó de un plumazo. O de un conciertazo mejor dicho. 20 canciones que me dejaron en otro nivel. Después de una especie de abandono sentí que recuperé el fanatismo que tuve años atrás. Tipo calcetinera, pero sin gritar "Liam te amo!!!!" obviamente. Pero sí saltando, cantando (y gritando a veces) tooodas las canciones, chiflando y aplaudiendo cada término, con la piel de gallina en algunas, recordando otros años, empujando para llegar adelante, cantando a ojos cerrados... La cagó. Fue notable de principio a fin. ¿Que empezaron tibiamente? Patrañas!! Turn up the sun es para agarrar vuelo rapidito. Y de ahí en adelante, por un tubo. Uno de canciones nuevas (rumbo a ser memorables como "The Meaning of Being Idle") y otras clásicas que hicieron explotar el Velódromo.

Destacados:
Champagne Supernova (Increíble Starkey en batería)
Morning Glory (Sorpresa del setlist, pero un temazo!)
The Masterplan (Otra sopresa, otro temazo. La cagó!)
Acquiesce (Todos saltando y gritando con un lado B que debió haber sido single. INcreíoble)
Live Forever (Clásico dentro de los clásicos, el espíritu de Oasis hecho canción)
Don´t Look Back in Anger (Sencillamente, se pasó)

Fue corto, es cierto. Pero como dijo Manolo estos tipos podrían tocar horas y uno no quedaría conforme. Faltaron algunas canciones que deberían estar sí o sí (Supersonic, Roll with it, Go let it out), pero qué más da. Casi pierdo una zapatilla, pero filo. Hubiera valido la pena.No pescaron mucho al público? Puede ser que no lo hayan hecho hablando, pero sí con lo mejor de Oasis: su música. Y lo hiceron a toda raja.


I wanna live forever...

Rol with it!!!!

Ocho laaaaaaaaaargos años.
Un disco en vivo (buenísimo!), un disco regular, pero bastante subestimado y con unos temas noatbles (Go let it out, Who feels love? y Fuckin in de bushes), otro disco regular pero con otros temones (Songbird, Born on a diferent Cloud y Little by little) y un último disco que los pone en el Olimpo otra vez. Todo eso pasó entre la primera visita de Oasis a Chile y el concierto de mañana. Mucho tiempo, es cierto, pero volvieron en el momento justo y preciso. Oasis está de vuelta en el mundo de la música con un álbum de lujo: Don´t belive de truth es un retorno a los dos primeros discos de la banda, aquellos que les dan derecho a autoprocalmarse "La mejor banda del Reino Unido". Es una exageración, pero es innegable que marcaron a toda una generación liderando el Britpop.

Fue el primer grupo del que me declaré fanático. Y al primero que fui a ver en vivo. Aluciné con What´s the story(Morning glory?) y después me fui por un tubo siguiendo la carrera. Estuve en San Carlos de Apoquindo cuando vinieron el 98´, sentado en la galería acompañado con mi mamá porque todavía no me dejaban ir solo, haciendo la ola con ella y cantando las canciones a todo lo que da.

Y sigo siendo fanático. Voy al estadio mañan como caletinero. A cantar todas y cada una de las canaciones, como en el Paseo del Ombligo cuando a las 5 de la mañana nos pusimos a corear Wonderwall y otros clásicos con Pancho y Manolo. Nooootable!


Esto es Rock and roll puro. Suelto, relajado, con estilo y carácter. Todo lo que les permite cantar que van a "vivir por siempre".