26.11.05

Aguante Pearl Jam!!!

Esta semana tenía dos temas para postear. Pero este ganó por lejos. Quizás como experiencias personales anduvieron por ahí, pero el concierto de Pearl Jam fue un hito histórico y por eso lo posteo antes.

15 años de espera pa que vinieran.
Un mes y medio con la entrada comprada, guardada en un cajón, protegida pa que no se fuera a perder.
5 horas antes del concierto esperando en la entrada del estadio, con el sol quemando fuerte.
700 pesos por una botella de agua mineral.
4 horas adentro del estadio esperando, en medio de la cancha, que se iba llenando con el paso de las horas.
1 hora de canciones de la banda que teloneaba antes, Mudhoney (a todo esto, muy buena) y ...

Un segundo para que explotara el estadio entero con la entrada de Vedder y cía. Mal que mal fue muchísimo tiempo durante el que se contuvo esa explosión y eran 25 mil personas mas o menos las que estaba repletando el lugar. Un par de saludos y nos fuimos carajo. Abren con Release, quizás no la canción más potente pero buen tema de enganche. En realidad qué tema no hubiera enganchado al tiro!!! Hasta con nothingman hubiesen prendido igual. Después Corduroy, otro temón, y a la quinta patita, una nota bastó y el estallido: It´s evolution baby. Do The Evolution nos hizo saltar a todos. Porque el que no quería saltar, perdía. Se iba hacia atrás con la marea, se perdía entre los brazos, se ahogaba, cualquier cosa. Pero era más recomendable saltar con todos. Después, cuando todavía no tomábamos un respiro, Given to fly. Otro temón, como toda la noche no más. De ahí vinieron
I am mine, Grievance, Small Town, Even Flow (otra vez colapsó el estadio entero), Lukin, Not for you, Daughter, Down y Jeremy. Quizás de lo más esperado de la noche, saltando y cantando como loco, ya medios mojados por el rocío nocturno de la precordillera. Después Save you, Go y empezó un trio de canciones que terminaron de romperla. Better Man, tema pa gritarlo, sentirlo, emocionarse y cantarlo 10 veces más. La cagó. Como si no hubiese bastado, Black. Como dijo un amigo, tema para llorarla... "I know someday you´ll have a beatiful life, I know you´ll be a star. In somebody else´s sky...". Ufff. Y para cerrar ese bloque, el segundo, tocan Alive, un verdadero himno. La cagó. El cierre lo hicieron con Miracles y Baba O'Riley (dos covers) y Yellow Ledbetter. Qué manera de cerrar una noche de lujo, histórica, increíble.

Perfectamente nos podríamos haber quedado un par de horas más webeando allá arriba. Pero por alguna razón todos salimos de inmediato. No hubo peticiones pa que volvieran ni nada de eso. Yo cacho que fue porque salimos totalmente satisfechos, sin reclamos. Porque el listado de canciones fue casi perfecto. Porque el ambiente era notable y porque tuvimos dos horas que nos dejaron satisfechos por un buen tiempo más. Aparte Eddie Vedder lo dijo clarísimo: la próxima vez demoraremos menos tiempo en volver. Claro, fue con tres botellas de vino en el cuerpo, pero ojalá sea así, que no pase más de un par de años para que estén de nuevo acá, dándonos un espectáculo de los buenos.

She feeds him, yeah...that's why she'll be back again... Can´t find a better man//And he still gives his love, he just gives it away...

Pd: Gracias a la Manolo por el listado de canciones y la foto no es del concierto chileno por si acaso. Aún no me mandan esas imágenes.

8.11.05

Quitapenas
Hay un bar llamado así, que se hizo famoso y se ganó su nombre porque mucha gente que iba a enterrar o visitar a sus muertos al cementerio en Recoleta pasaban después a terminar con su tristeza tomando. Y harto. Yo nunca he ido, pero tengo recetas mejores para superar esos momentos poco dichosos. En realidad no es una receta, porque puede que no le funcione a todos. Pero a mi me ha servido mucho y el fin de semana lo comprobé. Uno es el fútbol. Ese deporte notablemente bello es un aliado para pasar las penas. Después de andar bajoneado, pensando en muchas cosas, con cara larga, quizás llorando, ver un partido es sumamente efectivo. Claro, te distrae por un momento y te concentras en el juego solamente. Pero además de ver fútbol, son las alegrías que te provoca lo que sirve como consuelo. El resultado final, haber derrotado al equipo rival, que haya sido emocionante, los golazos... Alegrías que sólo te puede dar el balompié y que alivianan un poco el dolor. Suena cuático, pero el fútbol es un gran remedio.

La otra "herramienta" son los amigos. Uno los quiere siempre, está claro. Los valora y por eso los tiene como amigos. Hay un cariño permanente con ellos y uno sabe que están ahí. Pero uno los valora mucho más cuando te apoyan, están presentes y se preocupan. Cuando tratan de pasar la pena contigo, junto a ti, y llegan a compartir tu pena incluso. Y lo manifiestan de distintas maneras. Escuchando, contándote su experiencia, hablandote de lo que sea, inventándote carretes, invitando a tomarte una pisocola, echando tallas, webeándote, molestando, con un abrazo, un llamado de teléfono, una buena conversa.... Da igual la forma. El asunto es el fondo. Se hacen presentes, están ahí y te reconfortan, aunque sea por un momento. Y al final eso es lo que queda. La pena después, pasará.